lunes, 14 de julio de 2014

Casualidades que te cambian la vida

Y de repente, un día cualquiera, conoces a alguien que, sin darte cuenta y sin quererlo, te hace sonreír. Y que, además, llega a comprenderte mejor que cualquier persona cercana. Sientes conocerla de toda la vida, aunque nunca la hayas visto, es como si fuese un motivo que te haya perseguido al mismo tiempo en que estuviste huyendo, tratando de encontrar una razón por la cual valiera la pena luchar. La encuentras. Estaba en un lugar sin esperanza, en un lugar inhabitable. Poco a poco va haciendo un hueco en tu vida. Finalmente lo hace. Abarcó la mayor parte de tu tiempo y de tus pensamientos. Echó raíces en lugares donde nadie más había estado, en esa parte donde te tocabas a diario y sentías un vacío enorme. Ahora ese vacío está lleno de vida. Y te preguntas: ¿Cómo una persona que conocí por casualidad se convirtió en la persona que había buscado toda mi vida? Y es ahí, justo en ese momento, cuando comienzas a creer en la magia.

:)


Un día sucede..

Un día sucede que, por más que se oponga el destino u otra fuerza, el rumbo de nuestra vida gira inesperadamente hacia la dirección correcta. Y seremos felices, disfrutaremos de ella por todo el tiempo que estuvimos esperándola. Y llega como viene todo lo mejor, inesperadamente. Como dicen “Nada dura para siempre, ni siquiera el dolor”, porque todo tiene un final con puntos suspensivos, no se sabe qué pasará más adelante, pero lo importante es saber lo que estamos sintiendo y viviendo en el momento, no importa nada más. No pensar en que algún día terminará, es lo mejor que podemos hacer. Nunca se me dieron muy bien las matemáticas, pero la esperanza multiplicada con la perseverancia da mejores y mayores resultados, que cualquier otra operación.